Africa:

<bgsound src=&#8221;africa.mid&#8221;></bgsound>

viernes, 29 de marzo de 2013

Reunión de viejos amigos...

Después de mucho tiempo, nos volvemos a encontrar para tomar un café y dar una vuelta. Han pasado muchos meses (desde el pasado verano) sin volver a compartir esas curvas de la carretera del sur. Los ánimos están muy tranquilos, demasiado para mi gusto, pero seguramente los años nos han abierto los ojos o tal vez "viejos miedos" o simplemente la tranquilidad de disfrutar del recorrido. Lo cierto es que he disfrutado como siempre, nos encontramos muchas motos en la carretera o en las diferentes paradas. Modelos nuevos y modelos antiguos, siempre los más apreciados o envidiados, esas Ducatis con su sonido tan peculiar (como de lavadora "descuajeringuada"), una Guzzi coj...Bmws, Suzukis, en fin toda esa "fauna" típica de un sábado por la tarde con el pensamiento puesto en la subida a los Loros un jueves santo por la mañana. Los amigos bien, el mono de cuero reluciente indica ya, de entrada, que hay ganas de curvear un rato. Las motos apunto, Ricardo siempre tiene preparada una sorpresa en su "kawua", esta vez se trata de un trabajo en aluminio como soporte de las estriberas traseras realmente sorprendente, la wallisaki sigue evolucionando.... Subimos los Loros hasta el mirador, hacia arriba el tiempo "pintaba" niebla y frío y decidimos volver a la carretera general, autopista del Sur y subir el Escobonal para continuar hacia Arico, nueva parada, cortadito y vuelta para bajar por Fasnia ya que los cosa iba de curvas. En la gasolinera intercambio de motos, tras insistir un rato, Ricardo se atreve con la R1200R, después de varios intentos de quitar la "pata de cabra" algún que otro improperio a los típicos intermitentes alemanes y que según él las marchas no entraban....retomamos la autopista y nuevamente en la entrada al Escobonal y ya tomada la medida al "cacharro" pues nada cag....leches y -hasta luego Lucas- realmente es que esa moto se deja querrer. Para finalizar y habiéndome metido en una bajada algo complicada acabo atravesado en mitad de la vía después de intentar dar la vuelta y quedando con la proa hacia un barranco. Qué hago ahora, no puedo empujar hacia atrás (la puta pendiente), si suelto el freno me la pego me falta un metro para poder girar, si me bajo de la burra para tener mejor apoyo me arriesgo a que se me vaya de lado... menos mal que Ricardo atento al asunto vuelve para atrás y me echa un cabo, una situación realmente absurda pero complicada. Como siempre digo, bien está lo que bien acaba.